miércoles, 18 de mayo de 2011

Contra la resignación, ¡Indignáos!



Liquidación
Pego un poema que tiene un poco que ver con lo que está pasando. Me refiero a este germen de rebeldía ante la crisis, o como hay que empezar a llamarla: la "gran estafa",  que comienza a cundir en las ciudades de nuestro país de la mano de jóvenes indignados ante la falta de espectativas. 
La fotografía es más explícita que el poema, mientras permanecemos distraidos nos liquidan, somos caros para el sistema. Los servicios públicos son caros, llegar a viejos es caro, tener hijos es caro, somos caros, en el momento en que no consumimos nos convertimos en caros, ¿qué nos queda?: esperar tranquilamente a que nos "liquiden" o rebelarnos. 
Me apunto a la segunda opción, a la de los "seres rotundos", "capaces de soplar esta realidad de humo" "y alumbrar otro tiempo de hombres y mujeres plenos".

Caminamos descalzos
Caminamos descalzos,
nos entretienen con juegos malabares
y cuando reaccionamos,
ha hecho carne el desencanto.
Aun así,
añoro un futuro de zapatos bruñidos,
de seres rotundos,
capaces de soplar esta realidad de humo
y alumbrar otro tiempo de hombres y mujeres plenos.

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